2020-01-07

Conversatorio: Ciudad y vivienda en el contexto de la crisis: ¿Qué política y qué políticas impulsar?

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Organizada por el Diplomado de Derecho a la ciudad y producción social del espacio, la iniciativa fue destinada a reflexionar sobre las formas de vida en torno a la ciudad, específicamente en materia de vivienda. Para otorgar distintos puntos de vista acerca de las dinámicas habitacionales, se convocó a distintas personalidades con experiencia en distintos sectore relacionados a la ciudad y vivienda.

Cristóbal Cortés, asesor legislativo del Diputado Gonzalo Winter y miembro de la Comisión de Vivienda informó que durante los últimos años, el número de personas que adquiere inmuebles para utilizarlos como bienes de inversión en lugar de vivir, ha aumentado en un 44%. Esto también influye en los índices de desigualdad, pues el 63% de los hogares que reciben algún tipo de ingreso por concepto de vivienda corresponde al 20% de las familias más ricas. En palabras del propio Cortés “Los ricos se están haciendo cada vez más ricos con la ciudad”.

Además, hizo énfasis en la necesidad de construir y concebir la ciudad como un lugar donde vivir dignamente más que como un lugar en el que hacer inversiones. A esto, le añadió la urgencia de construir una ciudad en función de sus habitantes, que constituya un espacio de comunidad, cooperación y sustentabilidad en el que las riquezas sean redistribuidas justamente.

Por su parte, Boris Cofré, Doctor en Historia y experto en Movimientos de Pobladores, se refirió al rol de los movimientos sociales durante las protestas iniciadas en octubre pasado y al surgimiento de nuevas fuerzas sociales y políticas como una oportunidad de democratizar la ciudad.

En relación a la crisis social y a la democratización del territorio, declaró que ésta es “una gran oportunidad para ver las cosas con esperanza”, pues podría significar una posibilidad para generar una nueva sociedad y una nueva forma de hacer política, considerando al pueblo como una nueva entidad dentro del escenario. Producto de ésto, también contempla favorablemente el panorama futuro, pues éste podría tornarse más favorable para las luchas colectivas.

Si bien destacó la nueva posición con la que están saliendo los movimientos para generar cambios en la sociedad, también reiteró la responsabilidad que esta conlleva, declarando que lo ideal que es estuvieran dentro de las asambleas y procesos de diálogo.

Tania Madriaga, Secretaria Comunal de planificación de la Municipalidad Valparaíso, expuso sobre los procesos de transformación democrática de los territorios que se realizan junto a sus habitantes.

Estos procesos se ven concretados en el programa de Planificación territorial integrada del municipio, que a través de instancias como consultas ciudadanas y trabajos territoriales con mujeres, inmigrantes y pobladores de la comunidad se trabajó en torno a la pregunta “¿Cómo es el Valparaíso que queremos?”. Una las principales demandas territoriales que se dieron a conocer fue la recuperación del borde costero, que en el pasado era utilizado como balneario y lugar de deportes por la población y en la actualidad es utilizada para fines comerciales de la Empresa Portuaria Valparaíso. Esta demanda quedó evidenciada en una primera consulta ciudadana -realizada en enero de 2019-  en la que 16000 personas se manifestaron.

Estas iniciativas de trabajo se impulsaron debido a que según Madriaga, “(anteriormente), no tuvimos la capacidad de conectarnos con lo que las personas estaban viendo en su vida y lo que estaban intentando hacer para resistir y transformar”.

Finalmente, Alfredo Rodríguez -arquitecto urbanista y ex Consejo nacional de Desarrollo Urbano- se refirió a las revueltas sociales como un movimiento excepcional y la urgencia de establecer un Proyecto de integración social y urbana de parte del Gobierno. Sobretodo tomando en cuenta las cifras de la Encuesta CASEN 2015, que manifiestan que un 21% de la población vive en zonas marginales, concentrándose la mayor cifra en Antofagasta (donde un 36% de sus habitantes habita en estos lugares). En total, serían cerca de 3 millones de personas las que viven en condiciones indignas.

En relación a estos índices, Rodríguez hizo hincapié en la necesidad de que el Gobierno de una respuesta a esta situación, ya que a pesar de que éste otorga subsidios para arrendar inmuebles, estos mismos beneficios hacen que los alquileres aumenten y por ende, la situación no cambie.

La jornada finalizó con una ronda de preguntas y comentarios de los asistentes a los expositores.